Un estudio de videojuegos para crear experiencias maravillosas.



Desde mi perspectiva de un joven de trece años, cuando creé mi primer juego en un microordenador de la época, el ZX Spectrum, sin acceso a internet ni recursos avanzados, siempre he anhelado una carrera en el desarrollo de videojuegos. Sin embargo, debido a diversas circunstancias, nunca pude materializar ese sueño.

Hoy, muchos años después y con un cabello más gris debido al paso del tiempo, finalmente veo mi deseo convertirse en realidad a través de la creación de un estudio independiente de videojuegos.

Rocketeer Industries es un estudio independiente

Lo cual implica asumir todas las características que conlleva ser independiente en la actualidad. Somos un equipo pequeño y cercano, con recursos limitados, sin inversores ni patrocinadores, pero con una pasión inquebrantable por desarrollar tecnología y juegos de alta calidad.

Lo que nos distingue del resto del panorama actual en la industria de los videojuegos es que toda la tecnología para llevar a cabo nuestros proyectos es de nuestra propia creación, no dependemos de motores desarrollados por terceros. Cada aspecto de nuestros juegos es concebido y elaborado por nosotros mismos, lo que nos permite mantener un enfoque único y personal en cada uno de nuestros proyectos.

¡Si deseas respaldar nuestro estudio indie y seguir siendo parte de la creación de experiencias maravillosas, te invitamos cordialmente a "invitarnos un café". Este pequeño gesto no solo será un impulso para nosotros, sino que también contribuirá directamente a la continuidad de proyectos emocionantes y sorprendentes que podrás disfrutar en tu dispositivo móvil.

Cada "café" que compartas con nosotros se traducirá en más creatividad, desarrollo y emoción. Tu apoyo financiero no solo es una contribución, sino una inversión en el crecimiento de nuestro estudio y en la creación de contenido que captura la imaginación y el corazón.

Apreciamos profundamente cada gesto de apoyo, por pequeño que sea. Únete a nosotros en este emocionante viaje y sé parte de la magia que estamos construyendo.

¡Gracias por ser un apasionado seguidor y por hacer posible que nuestra pasión se convierta en realidad!


Un estudio Almeriense.

Nuestro estudio esta situado en Almería, concretamente en Carboneras, donde reside nuestro nucleo duro, y donde se desarrolla nuestra tecnología y ponemos en marcha nuestros juegos.




Además disponemos también de una delegación en Boadilla del Monte (Madrid), que es la encargada de buscar patrocinadores y esponsor para nuestros desarrollos destinados a la variante eSport.

Mi filosofía de vida para la creación de juegos.

El estado actual del mundo es caótico; presenciamos imperturbables los conflictos armados que se desatan a lo largo del globo, observando los impactos devastadores de la industria armamentística en la vida de hombres y mujeres que se enfrentan directamente a la violencia. Las redes sociales, a su vez, nos sumergen en una experiencia vívida de las realidades de la guerra, mostrándonos de manera cruda y directa sus consecuencias.

En paralelo, el mundo de los videojuegos no permanece ajeno a esta realidad. Surge una plétora de títulos que nos permiten asumir el papel de soldados inmersos en los conflictos contemporáneos, transportándonos a través de imágenes a las posibles sensaciones y experiencias que caracterizan esos entornos bélicos.

Paradójicamente, la brecha entre presenciar una guerra real a través de las redes sociales y participar en un juego en primera persona parece estrecharse. Ambas experiencias se presentan como eventos distantes, sin consecuencias tangibles en nuestras vidas. La pregunta que surge, sin embargo, es crucial: ¿Qué tipo de mundo estamos construyendo al permitirnos la indiferencia ante la realidad de la guerra, ya sea observándola desde la distancia de nuestras pantallas o jugando a través de simulaciones virtuales?

Es imperativo reflexionar sobre la aparente desconexión emocional que experimentamos al enfrentarnos a estos eventos a través de medios digitales. Aunque estas representaciones virtuales pueden ofrecer una ventana a la comprensión de la violencia y sus consecuencias, también plantean desafíos éticos sobre la trivialización de la guerra y la desensibilización hacia sus impactos reales.

En última instancia, la cuestión trasciende la mera observación de los acontecimientos desde la comodidad de nuestros dispositivos; nos insta a considerar cómo nuestras acciones y elecciones, ya sea en el mundo virtual o en la realidad tangible, contribuyen a la construcción del mundo en el que vivimos. La indiferencia frente a la violencia y la guerra, incluso si es experimentada de manera virtual, plantea interrogantes sobre la responsabilidad colectiva y el tipo de sociedad que estamos forjando para las generaciones futuras. En la encrucijada entre la simulación y la realidad, debemos examinar críticamente nuestra participación en la construcción de un mundo donde la violencia pueda ser trivializada o normalizada.

Al explorar el potencial de los videojuegos como herramientas más allá del entretenimiento, surge la oportunidad de contribuir a la construcción de una sociedad más informada, empática y preparada para abordar los desafíos del mundo contemporáneo.

En este contexto, la responsabilidad ética en el diseño de juegos se vuelve esencial. Es crucial considerar el impacto psicológico y emocional que estos juegos pueden tener en los jugadores, así como garantizar que se aborden de manera adecuada temas delicados.

Asimismo, los videojuegos podrían convertirse en herramientas terapéuticas para abordar cuestiones de salud mental. Juegos diseñados específicamente para ayudar a las personas a gestionar el estrés, la ansiedad o la depresión podrían ofrecer un enfoque innovador y atractivo para el bienestar emocional. Es por ese motivo que mi idea es desarrollar los denominados "Serious Games".

Estos "serious games" pueden desempeñar un papel importante en la formación de la conciencia social y en la promoción del cambio positivo.